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Nombre común: Flor de las ánimas, Flor de encino, Lirio de San Francisco.
Características distintivas: Planta epifita mediana, de unos 50 cm de alto, con pseudobulbos alargados, con arrugas longitudinales, dos o tres hojas carnosas, largas y arqueadas, con una inflorescencia larga, en ocasiones de más de 1 metro, que surge del centro del nuevo brote. Presenta hasta una docena de flores color magenta con blanco muy atractivas. Existen formas más claras, más obscuras e incluso blancas, aunque muy raras.
Hábitat: Bosques de pino-encino.
Distribución: Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Estado de México, Morelos, D. F. y Guerrero. Endémica de México.
Restricciones: Ninguna, aunque se sobrecolecta en algunas zonas del Occidente durante las fiestas de Día de Muertos..
Cultivo: En un tronco no resinoso, (jacaranda, frutales, encino, palo dulce). Riego dos veces por semana, luz brillante (nunca sol directo), temperatura fresca a templada, humedad ambiental moderada y fertilizante foliar muy diluido (1 cucharadita por 4 litros de agua) cada 15 días. Dejar descansar a la planta disminuyendo los riegos entre diciembre y mayo.
Época de floración: Otoño.
Rodrigo Remolina